DAJABON, República Dominicana.-Debido a la inminente salida de la Misión de la Organización de las Naciones Unidas (MINUSTAH) de Haití, la población fronteriza está a la expectativa.
El anuncio ha sido de mucha preocupación para sectores sociales, comerciales, productivos y económicos de esa nación, ya que la misma desde hace varios meses se encuentra en una profunda crisis política e institucional.
Esta crisis devino en una agudización, por las protestas que han venido escenificándose en las últimas cinco semanas y que ya ha cobrado casi 20 víctimas mortales y más de 200 heridos.
En la frontera Norte dominicana, y en sectores homólogos a los de Haití, también están ojo pelao, porque al menos se estima que la crisis de la vecina nación será mucho más profunda con la salida de las Fuerzas de la MINUSTAH, lo que repercutirá de alguna manera en la República Dominicana, y particularmente en las poblaciones fronterizas.
Durante las cinco semanas de protestas, en las que piden la dimisión del Presidente Jovenel Moise, el intercambio comercial entre dominicana y Haití, incluyendo el meneo de los Mercados Fronterizos, han sufrido bajas considerables, lo que afecta la economía en gran medida, de ambos pueblos.-